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El Observatorio Arquidiocesano de Evangelización renueva su imagen

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Tras algunos meses de trabajo, y bajo el nuevo plan de la Vicaria de Evangelización, Camino Discipular Misionero, el Observatorio Arquidiocesano de Evangelización renueva su imagen. Esta necesidad de cambio nace del reconocimiento de que el Observatorio presta un servicio a la iglesia en general, brindando una mirada a la realidad desde las investigaciones que realiza y que puede generar nuevos modos de comprensión de lo qué pasa con y en el Pueblo de Dios. En este sentido, no se trata de acercarse a la realidad con una mirada que ya todo lo conoce y que puede llegar a ser determinante y definitiva, aludiendo incluso a una percepción de Dios que “inspecciona”; más bien, el propósito del Observatorio es leer la realidad con una mirada de fe, centrada siempre en el modelo por excelencia: Jesucristo. Así, los caminos son múltiples e inacabados.

Además, para analizar la realidad desde una perspectiva de fe será indispensable abordar lo ya elaborado por otras áreas del conocimiento, como las ciencias sociales, con la intención de brindar resultados coherentes con lo que las diversas comunidades requieren para vivir en sus contextos. La fe no está alejada de lo que otras voces pueden percibir y decir sobre lo que acontece.  

Los tres elementos que conforman la nueva imagen del Observatorio son: 

  1. Lupa: acercarse a la realidad siempre será un reto. Para ello, se requiere de herramientas, que, sin ser invasivas, ayuden a su lectura y que permitan deba hacer una lectura de la realidad de manera profunda, precisando detalles y destacando elementos que son urgentes por analizar. La exactitud de lo que se observa ayudará a determinar qué se debe hacer.

     

  2. Gráfico y sus colores: puesto que la intención del Observatorio es entregar información concreta, producto de las investigaciones que lidera, la imagen interna de la lupa es un gráfico. Este alude que no solo se trata de observar la realidad, sino de generar datos e información que sea necesaria para el análisis de lo que sucede en la realidad, con la intención de iniciar planes de trabajo que impacten a la comunidad.

    Ahora bien, en cuanto a los colores que conforman el gráfico, estos aluden a las diaconías, entendidas como formas de servicios desde las que se busca articular la acción pastoral para salir al encuentro de las comunidades, “brindando acompañamiento y apoyo, fomentando la comunión y la participación”. El color amarillo alude a la diaconía para la espiritualidad sinodal; el color rojo, a la diaconía para el desarrollo humano integral; el color azul, a la diaconía para la formación discipular misionero; y el color verde a la diaconía para la esperanza. 

     

  3. Cruz: la mirada que se hace a la realidad desde el Observatorio es la cristiana. Esta centralidad es vital, pues destaca la razón del Observatorio Arquidiocesano de Evangelización y da apertura a otras percepciones, independiente de que apunten a una mirada distinta. Los análisis que se generen desde este órgano arquidiocesano ayudaran a reconocer algunas motivaciones de por qué se concibe la realidad cómo se hace.